Si lo que ella sentía era agradable tu sentías que te quería.
Pero si lo que ella sentía era malestar, tristeza, agobio,.. tú lo sentiste como rechazo hacia ti. Fue un impacto que se quedó alojado en tu inconsciente.
Estos impactos reaparecen ya de adulto cuando recibes uno análogo al de aquel momento.
Anatheóresis, creada y explorada intensamente por Joaquín Grau, parte de la base de que los daños emocionales o físicos que puedas estar sufriendo de adulto frecuentemente tienen su base en la infancia, desde la fase embrionaria hasta los siete años incluso hasta los doce años.
De esa manera, los impactos que recibiste desde el momento de ser concebido se fueron integrando en tu mundo inconsciente al igual que tus respuestas reflejas de defensa ante ellos.
Hoy día la física cuántica ya ha demostrado que las llamadas “enfermedades” tienen su origen en un impacto emocional no resuelto y mantenido a lo largo del tiempo.
Anatheóresis trabaja con el hemisferio derecho del cerebro que es emocional, creativo, sensorial,.. porque fue ahí donde se grabó el impacto.
A través de la inducción a un estado de relajación profunda se hace una inmersión a un nivel de conciencia donde los ritmos cerebrales bajan a 4 hz.
Anatheóresis está basada en las diferentes formas de percibir.
Esta característica te permitirá vivenciar aquellos hechos que te dejaron marca. Llegarás a comprenderlos pudiendote liberar de la carga que supusieron por la manera de sentirlos entonces, donde la comprensión correspondiente al hemisferio cerebral izquierdo todavía era inexistente o tenía muy poco protagonismo.
El objetivo es llegar a tu subconsciente para que esos bloqueos en forma de depresión, angustia, fobia, o lo que hoy te esté impidiendo llevar un vida plena… sea sanado desde la raíz.